Pymes argentinas proveerán al sector minero latinoamericano
Siguen llegando las buenas noticias para las pequeñas y medianas empresas orientadas al rubro minero. A través de unas reuniones mantenidas en el marco de la “Ronda Inversa de Negocios”, empresarios de México, Bolivia y Perú se mostraron interesados en comprar productos locales para destinar a su producción minera. Los participantes fueron 74 pymes de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza, y esto sirve para demostrar que Argentina realmente merece estar ubicada en el sexto lugar de los países mineros más importantes.
Al estar en una posición tan privilegiada es natural que se desarrollen bienes de capital que suman a la cadena de valor del sector. A través de esta ronda de inversiones, los empresarios visitaron las plantas de las firmas locales, conocieron los procesos de desarrollo y producción por dentro, y muchos de ellos quedaron convencidos de la calidad de los productos argentinos dedicados a la minería, al ser de última tecnología y demostrar una evidente innovación.
Uno de los acuerdos establecidos provino de la empresa ATF de Perú, que concertó tratos con las firmas locales Tecnubil, encargada de la fabricación de tornillos, tuercas y arandelas forjadas para la minería, y Vibromaq, fabricante de vibradores electromagnéticos y zarandas vibratorias. También la empresa boliviana Comibol se mostró interesada por muchos de los productos, y se sorprendió de tener una oferta tan cercana, dado que actualmente está importando sus insumos desde Australia y Estados Unidos.
Los principales intereses de los empresarios latinoamericanos recayeron sobre productos como acoplados, remolques, montacargas, balanzas, calderas, tubos y caños de acero, cilindros para envasar gases, y muchas cosas más que son típicas para el funcionamiento de la industria minera. Desde el año 2003, las inversiones se han incrementado por un 1000 por ciento, mientras que las exportaciones crecieron en más del 250 por ciento. Por el lado social, se crearon más de 150 mil puestos de trabajo, lo que sirve para demostrar que no solamente la extracción de metales está siendo provechosa para las economía regionales argentinas.