La riqueza argentina en litio atrae a grandes automotrices y suma fuertes inversiones
Jujuy y Salta mantienen su atractivo pese al momento complicado que vive la minería por las trabas vigentes. Argentina ya compite de igual a igual con los principales comercializadores del producto. El desembarco de YPF y las últimas movidas estratégicas en el nicho
Por Patricio Eleisegui
Pese a los obstáculos que impone el Gobierno a las empresas, como las trabas al ingreso de equipamiento importado o la imposibilidad de girar divisas al exterior, lo cierto es que las iniciativas para explotar el litio en Argentina -considerado por automotrices y fabricantes de tecnología como la materia prima del futuro- siguen a todo vapor en el norte del país.
Una reciente ejemplo de esto es la decisión de Toyota de poner en marcha el yacimiento Sales de Jujuy, en alianza con la minera Orocobre.
La firma estima que en septiembre estará produciendo carbonato de ese mineral en alta calidad. Y que cerrará este 2014 con un nivel de extracción cercano a las 5.000 toneladas.
En una primera etapa, que se extenderá hasta agosto, Toyota habrá desembolsado unos u$s160 millones.
La automotriz ya anticipó que, con el correr de los meses, instalará una planta para aprovechar el mineral en la fabricación de baterías. El objetivo que se plantea es el de abastecer la producción de autos en Brasil.
La iniciativa de la firma japonesa no es la única que se conoció en estas últimas semanas. En simultáneo, Exar, subsidiaria de la minera Lithium Americas, prevé producir antes de fin de año unas 200 toneladas de fosfatos de litio para luego avanzar con la explotación de cloruro de potasio.
De este emprendimiento que se realizará en Jujuy participa la automotriz Mitsubishi.
Renault también apunta a hacerse de este mineral en la Argentina, de la mano de las compañías francesas Bolloré y Eramet (bajo la denominación comercial Bolera Minera), en el salar Chancarí.
A la par de estos movimientos, en la zona de la Puna también marchan a paso firme varias iniciativas tendientes a ampliar la infraestructura en desarrollos vinculados con la minería.
FMC Minera del Altiplano acaba de confirmar que desembolsará alrededor de 200 millones de pesos para completar la construcción de un gasoducto en Salta, otra de las provincias dotadas de amplias reservas de litio.
El proyecto, conocido hasta el momento como «Fénix», comenzó a cobrar vida en abril pasado. Se estima que una vez concluido, tendrá una longitud de 135 kilómetros, además de conectar a localidades como Cobres, Olacapato, Salar de Pocitos y Tolar Grande.
FMC Minera del Altiplano es una subsidiaria de la estadounidense FMC Lithium, que en 2010 anunció una inversión de u$s25 millones para extraer sales de este mineral en el noroeste del país.
Más actores se suman al negocio
En materia de reservas y extracción, la Argentina está excelentemente posicionada gracias a los yacimientos que albergan salares como el de Olaroz (Jujuy), del Rincón (Salta) y Hombre Muerto (Catamarca), entre tantos otros.
«Si venciéramos los obstáculos tecnológicos que hoy impiden obtener esta materia prima en un grado de altísima pureza, nuestras exportaciones se incrementarían exponencialmente», señalaron fuentes del sector.
Entre las investigaciones más significativas en las que se está avanzando para aprovechar este recurso, se destaca la creación de la primera batería de ion-litio 100% nacional.
Este es un desarrollo a cargo de profesionales de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
No obstante, la Universidad Nacional de Río Cuarto quiere dar un paso más en la carrera hacia la industrialización de este elemento, más liviano que el agua.
Según César Barbero, profesor de dicha institución e investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), el nuevo objetivo es perfeccionar las baterías de litio desarrolladas hasta ahora.
Por estos días, con las reservas comprobadas y ya operativas, la Argentina presenta el siguiente detalle de producción, en comparación con el acotado número de países que posee litio:
Interés en alza
Pese a que la minería argentina no está pasando por su mejor momento, Diego Pestaña, presidente de la Cámara de Proveedores de Empresas Mineras de Salta (CAPEMISA), resaltó que el único rubro que exhibe un nivel interesante de actividad es el del litio.
Según pudo averiguar iProfesional, esto responde a que a los inversores les interesa -más que cualquier otra variable- la provisión del insumo a largo plazo y no tienen muchas alternativas fuera de la Argentina.
«Sucede que Bolivia y Chile presentan diferentes tipos de limitaciones que no hacen posibles los nuevos desarrollos», aclaró el empresario.
En línea con sus afirmaciones, pueden citarse los casos de las mineras australianas Ady Resources, Orocobre y Galaxy Resources; del grupo estadounidense FMC; de las automotrices Toyota y Mitsubishi, y de las canadienses Lithium Americas Corporation y Lumina Copper, entre otras firmas presentes en el mercado nacional.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, según sus siglas en inglés), las reservas identificadas de litio en la Argentina hoy se sitúan en las 850.000 toneladas métricas (Tnm).
Sin embargo, en el corto plazo esa cifra podría más que triplicarse y trepar hasta los 2,5 millones de toneladas.
A nivel productivo, el país se ubica en el cuarto lugar a escala global, detrás de Australia, Chile y China.
Argentina ya ha superado a naciones como Portugal (820 Tnm), Zimbabwe (500 Tnm) y Brasil (490 Tnm).
El siguiente cuadro muestra cuáles los principales usos de esta materia prima tan codiciada:
El desembarco de YPF
En paralelo al movimiento de los capitales foráneos, en las últimas semanas se sumó un gran protagonista en la competencia por el litio: la petrolera YPF.
En ese sentido, Y-Tec, el brazo tecnológico de la estatal, acaba de colocarse al frente del Consorcio Asociativo Público-Privado (CAPP) «Litio Argentino», una plataforma destinada a promover la investigación y el desarrollo de tecnologías para la extracción y el posterior procesamiento del mineral.
Conformado bajo los términos de la convocatoria del Fondo de Innovación Tecnológica Regional «Industria», que impulsa el Fondo Sectorial Argentino (Fonarsec), el consorcio también está integrado por la firma química Laring San Luis y la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu).
«Vamos a presentar nuestro proyecto ante la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT), organismo que depende del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (MinCyT), que es la autoridad de aplicación», explicó Gustavo Bianchi, director general y apoderado de Y-Tec.
«La idea es producir compuestos aplicables en baterías de ion-litio y otros usos, además de implementar tecnologías para el monitoreo del impacto ambiental que resulte de la extracción del recurso», agregó.
El financiamiento de «Litio Argentino» correrá por cuenta del Fonarsec, mientras que el modelo de gestión asociativa podría ser replicado en otras iniciativas que se acuerden en el futuro.
«La propuesta va desde la génesis geológica y extracción del mineral hasta su empleo en baterías de última generación dentro de una estrategia sustentable», precisó.
El consorcio será manejado por un Consejo de Administración, que deberá tomar las decisiones relativas a los lineamientos generales de su funcionamiento.
El proyecto del CAPP «Litio Argentino» contempla la instalación de un centro de investigación en Jujuy, donde se desarrollará la mayor parte de las actividades.