La minería genera futuro
Estamos en un momento crítico para la minería argentina. Su impresionante crecimiento en los últimos años, sumado al apoyo oficial, aumentó su capacidad para otorgar beneficios a todo el país. Sin embargo, muchas veces es demonizada por cuestiones ambientales que no tienen sustento una vez que aplicamos la ciencia a sus argumentos.
La minería genera futuro, no lo consume. Está demostrado que la minería puede ser sustentable, y en Argentina se están aplicando tecnologías de última generación que eliminan y reducen el desperdicio de materiales y agua que, con métodos obsoletos, se generaba con la extracción de minerales. La minería puede ser también amiga del medio ambiente, si observamos cómo son sus técnicas. Además, Argentina tiene uno de los estándares de seguridad ambiental referidos a la minería más altos de todo el continente.
Pero no sólo esto: en los últimos años, la minería ha demostrado ser una fuente importante de empleos, con miles de personas trabajando cada día en las diferentes pequeñas y medianas empresas dedicadas al rubro. No solamente en empleos directos, sino también a través de las PyMEs que se dedican a proveer materiales e insumos a las mineras que explotan.
Finalmente, todo esto se traduce en una mejora en las economías regionales del país, que históricamente se han visto relegadas por el poderío económico de Buenos Aires. Así, las provincias consiguen mejores ingresos gracias a la presencia de las mineras, ingresos que luego pueden ser traducidos en inversiones y mejoras que, al final del día, aumentan la calidad de vida y las oportunidades a futuro de sus habitantes. Por eso, insistimos: la minería es algo que genera futuro.