La minera que combate el coronavirus en Santa Cruz y abre las puertas a las mujeres
En medio de la paralización de todas las actividades por el aislamiento social, preventivo y obligatorio que se impuso para combatir al coronavirus una empresa minera aporta casi 120 millones de pesos en la comunidad para paliar la crisis económica en distintos aspectos.
Newmont realiza donaciones a centros de salud en las localidades cercanas a donde opera y sus zonas de influencia como Perito Moreno, Los Antiguos, Las Heras y otras localidades de la provincia de Santa Cruz como Río Gallegos y Caleta Olivia.
También aporta a un fondo de resiliencia para pequeñas empresas y comerciantes locales dando soporte a contratistas más vulnerables y a un programa de asistencia alimentaria para comunidades cercanas.
Una de las compañias más grandes del mundo, actualmente operando el proyecto Cerro Negro en Santa Cruz, anunció días atrás el establecimiento de un fondo para ayudar a comunidades, gobiernos y empleados a combatir la pandemia del COVID-19.
El fondo permite que la compañía trabaje con gobiernos locales, instituciones médicas, organizaciones benéficas y organizaciones no gubernamentales en la planfinicación y destinación de recursos para áreas estratégicas a nivel social.
Con el aporte de las partes interesadas locales, la compañía ha identificado tres áreas clave en las cuales se enfocará para garantizar que el apoyo financiero llegue a aquellos sectores más necesitados durante y posteriormente a la pandemia. Las mismas son: empleo, salud y comunidades; seguridad alimentaria y resiliencia económica local.
Pero el perfil de la firma no se agota ahí. Es sin dudas una de las compañías que mas le da lugar a las mujeres.
En Newmont Cerro Negro, Belén se desempeña en el sector de Operación de Superficie donde maneja maquinaria pesada. «Me causó mucha intriga, también me causó miedo pero hoy me siento bien y veo que cada vez incluyen más y el trabajo es hermoso», comenta la joven que espera poder “aprender (a manejar) todas las máquinas que tengo en mi sector de trabajo”.
El trabajo se hace igual siendo mujer o siendo hombre
Nadia empezó realizando pasantías luego de ser seleccionada por su buen promedio en el Colegio Secundario. Inició en el área de Despacho y seguidamente pasó a Recepción donde se ocupa del reparto de la mercadería y es responsable de contactar a los proveedores.
“Es un crecimiento tanto profesional como personal. Aprendés cosas nuevas y te abre un montón de puertas donde el día de mañana puedo cambiarme de área y tengo más chances”, explica.
Trabajar con varones
En un ámbito laboral en el que mayormente se desempeñan hombres, dice Belén que a su familia “le impactó un poco, no es común que una mujer trabaje en minería. Hoy sí, en su momento, no. Quedaron impactados pero siempre me apoyaron en todo momento, hasta el día de hoy me siguen apoyando».
Para ambas las experiencias con sus compañeros han sido positivas.
“Son muy compañeros conmigo, me incluyen en todo, vamos al gimnasio juntos, vamos a comer, juego al fútbol con ellos”, dice Dalma. Por su parte, Belén destaca que “a la hora de enseñarnos nos tuvieron mucha paciencia, el trato es muy bueno».
En sus francos, principalmente comparten con sus familias. Dalma es apasionada del fútbol y de andar en cuatriciclo mientras que Belén es vocal suplente del Club Hípico donde están trabajando para que vuelvan a realizarse las carreras.
A las mujeres, Belén les deja un mensaje que “confíen en ellas, pueden y en que el trabajo se hace igual siendo mujer o siendo hombre. Que se animen porque es un trabajo muy lindo y se aprende mucho”
Publicado en La Opinión Austral el 07/05/2020