Inversión millonaria de una empresa canadiense en su mina de oro argentina
Lindero, la primera mina de oro de Salta, recibirá una inversión de u$s 64 millones este año, que será destinada a mejorar el procesamiento y en el avance hacia las energías renovables. La encargada del desembolso será Fortuna Silver Mines, en la Argentina con su subsidiaria Mansfield, a cargo del proyecto que confirmó la inversión.
Del total de la inversión, u$s 41,7 millones quedan pendientes para la segunda fase de la expansión de la plataforma de lixiviación que, según informó la compañía en una presentación de resultados, se completaría en el segundo semestre del año.
Otros u$s 12,5 millones se destinarán a la extracción de mineral, u$s 6,6 millones para el reemplazo y readecuación de equipos pesados utilizados en la mina y u$s 3,2 millones para otros repuestos de la planta.
La inversión llega a pesar de una reducción en las proyecciones y también, justamente, para mejorar la performance de la mina que Fortuna tiene en el país -la compañía también cuenta con minas en México y Perú, además de en África- y sobre la que redujo su previsión para este año, a 93.000-105.000 oz.
El año pasado, Lindero aportó 94.905 oz en barras de doré, 6.015oz contenidas en carbón fino y 319 oz contenidas en concentrado de cobre, como consta en el informe anual de la compañía minera con sede en Vancouver.
Entre los planes del proyecto que se encuentra a 3800 metros de altura sobre el nivel del mar en el Salar de Arizaro, a partir de esta nueva inversión, trascendió que las mejoras en el proceso de lixiviación también están dirigidas al aporte que puede tener el proyecto Arizaro, que con muy buenas proyecciones se encuentra en exploración ‘greenfield’.
Los detalles de la proyección muestran que Fortuna espera colocar unos 6,6 millones de toneladas de mineral desde Lindero en la plataforma de lixiviación en pilas con un promedio de 0,62g/t de oro, o un contenido aproximado de 131.000 oz de oro.
En ese proyecto avanza también la construcción de una planta fotovoltaica de 6MW para abastecer las operaciones industriales, que comenzaron hace casi cuatro año, según informó el gobierno de Salta en un comunicado en el que también dijo que la Secretaría de Minería y Energía provincial aprobó el informe de impacto ambiental.
Como sucede en otros proyectos mineros, la incorporación de energía renovable tiene el objetivo de reducir la dependencia del diésel, en una zona de alta radiación solar como es la puna salteña.
En el informe anual de Lindero, también se hace referencia al avance del proyecto y las inversiones en relación a las condiciones económicas, y específicamente tributarias, que se establezcan finalmente en la actual administración del presidente Javier Milei. Incluso cuando explican que los costos operativos pudieron reducirse en los últimos meses y siempre dependiendo de los precios internacionales de los metales.
Hay un «enfoque comprobado en la asignación de capitales y una gestión de costos eficiente», señaló el CEO de Fortuna Silver Mines, Jorge Ganoza.
Cuando inauguró la mina en mayo de 2022, el ejecutivo recordó que desde 2018 llevaba invertido de manera directa u$s 440 millones en las fases de exploración, preconstrucción, construcción y preproducción.
Publicado en El Cronista el 24/02/2024