“Caminos hacia un desarrollo sustentable”
Declaración y compromiso minero
Los representantes de:
– La Asociación de Obreros Mineros Argentinos (AOMA);
-El Consejo Federal de Minería integrado por todas las provincias argentinas;
-El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación;
-El Ministerio de Energía y Minería de la Nación a través de la Secretaría de Minería;
– El Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR);
-El Colegio Argentino de Ingenieros de Minas (CADIM);
-El Presidente de la Comisión de Minería de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación (HCDN), el Dr. Eduardo Cáceres;
– El sector privado de la industria minera, tanto empresas como proveedores de todo el país, nucleados en la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM),
Queremos dirigirnos humildemente y unidos a todo el pueblo argentino para hacerles llegar este llamado y compromiso:
DESARROLLO REGIONAL Y DE LAS COMUNIDADES
Nuestro sector minero, metalífero, no metalífero y de rocas de aplicación, tiene un enorme potencial para ser protagonista en el camino hacia una Argentina con más oportunidades, igualdad y federalismo. También sabemos que nuestra sola convicción no alcanza. ¡Necesitamos que todos los argentinos visualicen hoy la enorme posibilidad de crecimiento que representa nuestra riqueza mineral!
Minería representa trabajo de calidad, infraestructura e innovación.
Minería significa generación de industrias, comercios y servicios locales.
Minería expresa desarrollo, más aún enlas regiones más alejadas e inhóspitas de nuestro país.
Para dimensionar lo que afirmamos basta un dato: nuestros hermanos chilenos producen con su minería más que el doble que todo nuestro complejo sojero; países federales como Australia o Canadá han apalancado buena parte de su desarrollo en el aprovechamiento de sus minerales.
Entonces, por su ubicación y magnitud, la actividad minera surge como un factor incomparable de desarrollo regional. Y más aún, si proyectamos su potencial transformador en el largo plazo reconoceremos que la minería juega un rol fundamental como herramienta para descentralizar nuestro país en términos socio-económicos, políticos y hasta poblacionales. Creemos que esto será posible mejorando y profundizando los procesos de participación y el diálogo, para lograr un efectivo beneficio de las comunidades cercanas a los proyectos mineros y trabajando con responsabilidad social de forma tangible, efectiva, previsible y con proyección a futuro.
Es necesario que desde el inicio mismo de cada proyecto minero se incorpore un plan estratégico del municipio y de las zonas aledañas para producir el efecto de desarrollo zonal y generación de una economía sustentable más allá del plazo de existencia de cada uno de ellos.
MEDIO AMBIENTE
Ahora bien, frente a este gran potencial que nos entusiasma, reconocemos los desafíos que enfrentamos como industria y hoy queremos comprometernos a trabajar para superarlos.
Observamos que existe preocupación o desconfianza respecto al impacto de nuestra actividad sobre el medio ambiente, así como sobre la capacidad de un efectivo y adecuado control. Entendemos que la actividad minera requiere de una mirada moderna, con políticas públicas adecuadas, y una responsabilidad redoblada del sector privado, para no repetir errores del pasado. Reconocemos que es necesaria una mayor apertura hacia la sociedad, adoptando estándares de transparencia y buenas prácticas, bajo un absoluto respeto a las normas ambientales que resulten aplicables, y promoviendo un mayor diálogo con la sociedad a través de mejores procesos de participación ciudadana.
Asumimos que la minería debe constituir una herramienta federal para el desarrollo sustentable en todo el ámbito nacional y que para ello, es necesario coordinar las políticas y el desarrollo de los proyectos mineros con todas las herramientas de gestión ambiental, como el ordenamiento territorial, el respeto y fortalecimiento de las áreas protegidas, bajo los conceptos internacionalmente aceptables de interacción del ambiente con todas las industrias.
Es hora de mirar al futuro y afrontar el desafío de este momento histórico: queremos la oportunidad para demostrar, con trabajo y compromiso, que la actividad minera puede hacerse de un modo responsable. Hay mucho por hacer para lograr una mayor institucionalidad, más y mejor control ambiental, la adopción de nuevos estándares homogéneos de gestión ambiental, el efectivo beneficio de las comunidades cercanas a los proyectos mineros, fortalecer el diálogo y la coordinación entre los distintos niveles de gobierno, con las empresas y alentando la participación de las comunidades.
Pero se puede y debemos hacerlo, trabajando siempre con un criterio proactivo. Otros países lo han logrado y es inaceptable resignarnos, cuando llevamos todavía poco tiempo de desarrollo minero y tenemos a la mano muchas lecciones para poder hacerlo bien. Tenemos grandes condiciones y talento humano para desarrollar nuestra minería con cuidado del ambiente y en favor de nuestra gente.
TRANSPARENCIA Y COMUNICACIÓN
Todos identificamos que hay un valor central sin el cual ninguno de nuestros esfuerzos llegaría a buen puerto: decir la verdad, ser transparentes, comunicar y explicar, cuantas veces haga falta, todo lo relacionado con la actividad minera.
Consideramos que nuestro sector puede y debe mejorar la distribución de la riqueza que genera la industria minera. Queremos implementar la iniciativa para la transparencia de las industrias extractivas (EITI, por su sigla en inglés) para que la minería pueda convertirse en un importante actor en el crecimiento económico del país y que contribuya al desarrollo sostenible de las regiones.
Este compromiso surge de un serio diálogo de varios meses. Entre los sectores público nacional y provincial, el sector privado y trabajadores, cada uno desde su lugar, respetando su independencia y sus diferentes intereses. Hemos acordado trabajar coordinadamente para llevar a la acción estos compromisos.
Los firmantes establecen que:
El desarrollo humano y regional, el medio ambiente y la transparencia conforman los ejes de una nueva visión de la actividad minera argentina. El Estado Nacional, las provincias, las mineras, trabajadores y comunidades tenemos que trabajar unidos por el futuro de nuestro país.
Desde este compromiso, queremos hacer un llamamiento a toda la sociedad para que acompañe nuestro esfuerzo, valorando todos los aportes o críticas constructivas para lograr nuestro objetivo.
Estamos trabajando para que en breve puedan observar estos principios y estos compromisos se reflejen en acciones concretas.